lunes, 11 de enero de 2016

Creación Literaria

Creacion en prosa.

La estrategia utilizada es CUENTO DE COLORINES.
Lanzo en casa la propuesta de escribir un libro con palabras de colores. Les entusiasma. 
Hacemos una lluvia de ideas para buscar esas palabras de color. Nos quedamos con fresas, plátano, cielo, naranja... 
Después armamos un argumento: ¿Qué pasaría si el arcoiris hubiera perdido sus colores? 
Y así empezamos la creación literaria que desembocó en un libro.

La edad apropiada para desarrollar esta experiencia sería entre los 6 y 7 años.

Dejo que el libro lo cuenten las fotos:
(Disculpad la ausencia de la tilde en pidio pero ahora no me veo ni con luz ni con fuerzas para rehacer todas las fotos)




Creación en verso.

Estrategia utilizada: ¿CÓMO TE LLAMAS? Crear un acróstico con las letras de nuestros nombres.

Puede ser utilizada desde los alumnos de primer ciclo en adelante. La complicación la pone cada uno, Para los más pequeños sólo encontrar las palabras que empiecen por la letra requerida ya es suficiente. No haría falta que le den coherencia. Los más mayores sí pueden intentarlo.

Isaac.

Imagina
Saber
Amar.
Ahora,
Cuéntalo!


Estrategia utilizada: ACRÓSTICO. Crear un poema con una palabra escogida.

En cuanto a las edades: sirva lo dicho en la estrategia ¿CÓMO TE LLAMAS?

Educación.

Estudiantes, no
Durmáis.
Uniros
Creando
Acciones que
Cabalguen la
Imaginación y la
Observación.
Navegad!




Creación dramática.

Estrategia utilizada: CUENTO AL REVÉS.
Mi versión de esta propuesta va a consistir en empezar por el final y terminar con el principio. El cuento escogido para ser recreado en esta modalidad absurda es “Los tres cerditos”

La edad a la que va dirigida está experiencia es de 9 o 10 años, es decir, segundo ciclo. Dado que ya conocen el cuento y pueden captar el humor que hay detrás. A estas edades ya comienzan a ser capaces de ponerse en el lugar del otro (Etapa 3 del desarrollo moral, Kohlberg)

Sotidrec sert sol.

Acto 1

Interior de la casa de ladrillo. Los tres cerditos toman un té.

Pig: A mi no me disgusta tener un soplador ahí fuera.
Porco: Yo creo que es cruel. No tiene sentido, lleva meses soplando y no se cansa.
Poaka: Deberíamos construir una casa que pudiera derribar.
Pig: ¡Estas loco!
Porco: Yo también lo he pensado, podríamos hacer aquel proyecto… ¿os acordáis de aquella casa de madera que quería construir?
Pig: ¿¡Estáis locos!? ¿Queréis que nos coma el lobo?
Poaka: Tampoco es eso, pero… Es que sin nosotros el lobo no tiene cuento. Parece un loco aullando a la luna.
Pig: Y ¿a quién le importa?

Desde fuera se oyen soplidos de cansancio del lobo.

Poaka: A cualquier cerdo sano. No deberíamos poder estar calentitos y alegres mientras ahí fuera nuestro vecino sufre.
Porco: Tenemos que hacerlo. Tenemos que darle alguna oportunidad.
Pig: Yo me quedo. Mucho esfuerza me costó hacer esta casa como para abandonarla ahora.

Acto 2

Interior casa de madera.

Porco: Parece que el proyecto no era tan bueno.

Los soplidos del lobo ahora tienen otro empaque y los vigas de madera de la casa de Porco comienzan a astillarse.

Poaka: Bueno, al menos el lobo se está animando, ¿no?
Porco: Me hubiera gustado que está casa aguantase. Hasta me hacía ilusión no tener que vivir en la casa de nuestro hermano Pig.
Poaka: Yo estaba cansado de tanta comodidad. Te diré más. Estoy pensando en hacer una casa de paja a ver si así el lobo da un poco de miedo.
Porco: Pig tenía razón ¡estás loco!
Poaka: No, que va. Es que siempre me aburrió este cuento. ¿Quién quiere un lobo que no da miedo? Así no sirve para nada.

Acto 3

Interior casa de paja.
Al primer soplido una pared se desploma. El lobo mete su hocico olisqueando.

Lobo: Cerdito! Cerdiiii…to. No te escondas.
Poaka: Por fin nos vemos. ¿Y ahora que harás? ¿Vas a comerme?
Lobo: Te comeré y a tus hermanos también.
Poaka: ¿Tú crees? Llevabas meses soplando mientras nosotros tomábamos el té y nos reíamos de ti.
Lobo: Estaba a punto de derribar la casa.
Poaka: A mí me entristecía verte cada mañana temprano venir a soplar y soplar para nada. Tiene que ser muy triste ser el malo del cuento y no dar miedo a nadie.

El lobo, rojo de ira se abalanzó hacía dónde parecía estar escondido el cerdito y consiguió agarrarlo del cuello.

Lobo:  ¿Ahora te doy miedo? ¿Todavía tienes compasión de mí? Porque yo no la tendré de ti.
Poaka: Claro, claro. Adelante.
Lobo: ¿Qué?
Poaka: Sí, sí. Cómeme.
Lobo: No entiendo nada. ¿De verdad ya no doy miedo?
Poaka: No te desanimes, lobo. Por fin vas a comerme. Hazlo despacio y saboréame.
Lobo: Pero… ¿a ti que te pasa? ¿Es que quieres morir?
Poaka: Bueno, no. Pero quería cambiar el cuento. Estaba harto de quedar como el chapucero que no sabía hacerse una casa para protegerse. Yo no soy tan perezoso, ¿sabes? Es que me gusta vivir riesgos. Odio vivir cómodamente. No sé, me siento enjaulado con tanta protección. De esta forma, he podido hablar contigo y vivir un poco de tensión, de miedo, hasta de libertad. Y así puedo morir. Ya no me importa.
Lobo: Um…

Mientras suelta al cerdito y se sienta sujetándose la cabeza.

Lobo: Se me ha quitado el apetito. ¿De verdad ya no doy miedo?
Poaka: …bueno, un poquito.

Webgrafía:




3 comentarios:

  1. Hola Isaac. Lo primero darte la enhorabuena por el primer texto hecho cuento, me parece que has hecho un trabajo muy original y francamente bonito. Si tuviese que ponerle un pero solo sería esa pequeña rima que hace el texto al final "color" "salvó" y "encontró". No se si lo has hecho a propósito o si simplemente ha surgido así al realizar el cuento (que también puede ser).
    Con el texto dramático me parece que has hecho un buen trabajo porque trabajas casi por completo con el diálogo que es lo que se basa este tipo de textos. La adecuación de las edades me parece que es la correcta. Has hecho un trabajo muy completo y quiero insistir en lo realmente bonito tanto del texto en prosa como de la creación del cuento en formato físico. Siempre consigues sorprenderme con tu creatividad. ¡¡Muchas gracias por ello!!

    ResponderEliminar
  2. Está perfecto, Isaac. Enhorabuena por esa creatividad infantil que aún conservas a pesar de ser adulto.

    ResponderEliminar